COMPENDIO.

Del contar de mis pasos y de la búsqueda del cómo.

20110406
Contar de pasos:

Una vuelta a la izquierda, desafiando el ya no caminar derecho, me dió para conocer a quien me ha engalanado de cariños, metas y pasiones. Hasta con unos cuantos zancazos - quizá - y llegué al punto de caer ferozmente en esta enajenante etapa. Fueron quizá y cinco los pasos sin trunco y llegué yo al punto de estar, meramente bien acomodado. Van entonces nueve los pasos y al mirar hacia'trás, parece se ve lejano el punto dónde yo inicié el curso.

Herniarse de todo los sitios agrietados que han hecho hasta tropezar y que de lo mismo, me de por seguir dando saltos y no toparme la vista en frente de lo que sería, mi caída siguiente. Y no digo que esté del caer pendiente; pero no es grato sin siquiera formularme verme lleno de escabrosas costras al volver a verte.

¿Cuantos van? ¿Doce pasos? Dejémosle en trece, por que a los siguientes cuatro, dos fines y uno que otro día chato, se viene un 16 y del cual, espero dar a tu lado, el siguiente paso.

Busco del cómo:


Así como el perro en "Boda Polaca", me quedo mirando en la ventana el momento que tú, mi enculador, regrese por mí.

Así como.
Del como: Busco cómo dejar de pensar que la vida es un preludio y que debería de preocuparme de cómo será el "outro". Así me agarre un huevo y el pito y no agarre un pito de a huevo, para poder seguir teniendo un cómo.

De que la vida no me sepa sólo en momentos dulces si no que también me joda permanentemente en momentos amargos. Y que del instante en el cual no me sepa a gloria, me sepa a caca y aún así, me sepa. Sigo buscando del cómo.

Cómo dejar de verte sin erecciones en la mente y cómo dejar de pensar que en el ocaso de la sonrisa que me deleita. Busco del cómo verte de malas; hiriente. De aquella persona que me dices que serás cuando perenne el amor del mes.

Busco del cómo sólo en las peregrinaciones caducifolias y de cómo me digas: me estás chingando la madre. No sea quiebre, si no enmiende. Busco del cómo dejar de ser cursi, soso y empalagoso, para empezar a ser el que aquél y cuando, sea un machito pitoflojo mal hablado.

Busco del cómo dejar de llorarte como si fueses falto de existencia cuando estés a unos metros de distancia. Y busco del cómo afrontar, esta supuesta psiquefalacia que me dictaminan y poder seguir adelante.

Y llega entonces el momento en el que se me agota el saldo: AMIGOKIT DE COGER e inicia la cuenta regresiva para que me cortes la señal.

Y entonces, sólo entonces, termina mi busqueda del cómo, para iniciar a buscar los por qué.

1 comentarios:

Anónimo at: 22:29:00 dijo...

NO miento al decir queme da miedo, el verte, como si etso fuera una falacia, como si los minutos para verte fueran un experimento para resolver tus dudas, pero prefiero ser eso a no sabertecerca, por aún que solo fuera nada, esta nada me hace arder, me hace amar, y no quisiera ser el amor de un mes, no solo por que me propuse pelear por esto, sino por que creo que este viaje es increiblemente bueno.